Desparasitación de caballos
¿Quieres saber cómo se debe desparasitar un caballo paso a paso? Nosotros te lo explicamos en este post.
¿Notas síntomas de dolor o malestar en tu caballo? Lo más recomendable es verificar si tiene parásitos. Y es que, la presencia de lombrices o parásitos intestinales en el equino puede provocar cólicos, diarrea, pérdida de peso, úlceras, llagas en el hocico e hinchazón del estómago. Así que, conviene atajar cuanto antes su presencia con la correspondiente desparasitación.
Ante cualquier tipo de sospecha de que tu caballo tiene parásitos, consulta con el veterinario equino ya que existen diversas opciones de tratamiento. El profesional veterinario será quien establezca el tratamiento más eficaz para el equino.
Para valorar su caso y determinar si el caballo presenta parásitos, el veterinario te pedirá que le entregues una muestra fecal, la cual será analizada por el especialista a través de un examen de conteo de huevecillos fecales para averiguar si tu caballo tiene lombrices y, en su caso, de qué tipo son. Este aspecto es clave para que el veterinario pueda determinar qué desparasitante ha de administrarse, al ser el más efectivo para el caso concreto de tu caballo.
Llegados a este punto es vital incidir en la prevención, al ser uno de los recursos más efectivos para romper los ciclos de los parásitos y evitar que infecten a los caballos. Para ello, hay que retirar las heces de los establos y campos, así como mantener los bebederos limpios y emplear programas para el control de las moscas.
La monitorización frecuente con el veterinario, el análisis coprológico y la administración periódica de antiparasitarios ayudan a mantener a los caballos saludables. Los productos que se pueden utilizar, que serán prescritos por el veterinario, se pueden presentar en gel o en pasta para desparasitar y son los siguientes:
- Pamoato de pirantel: es efectivo contra larvas y formas adultas. Actúa contra diversos tipos de parásitos como lombrices, áscaris y oxiuros y en dosis doble elimina las tenias.
- Ivermectina en gel oral: resulta efectivo para gusanos y artrópodos. Es un antiparasitario de amplio espectro que cubre todas las formas. Por contra, no es efectivo contra las tenias.
- Praziquantel: es altamente efectivo contra equinococos.
Para saber la dosis correcta que se ha de administrar al caballo por prescripción veterinaria, hay que conocer su peso. Ten en cuenta que muchas jeringas dosificadoras para desparasitantes contienen lo suficiente para un caballo de unos 540 kg. En el caso de los caballos grandes, tal vez se necesiten dos jeringas.
Para averiguar el peso de tu caballo, utiliza una cinta medidora de una tienda especializada para caballos. Hay que tomar las medidas de alrededor del pecho del caballo y verificar a cuanto peso corresponde en la escala que te proporcionen.
Ahora bien, ¿cómo desparasitamos al caballo? Te lo contamos a continuación. Antes de continuar leyendo, ten en cuenta que, ante la duda de cómo hacerlo, es mejor acudir al veterinario para que nos explique con todo lujo de detalles el procedimiento a seguir.
Procedimientos para desparasitar a un caballo:
- Desparasitar con una jeringa dosificadora: ten preparados a tu caballo y el medicamento. El caballo debe tener puesto su cabestro, de donde lo sostendrás cuando administres el desparasitante. Quita la tapa de la jeringa ajustando el anillo de dosificación en la marca correspondiente. Introduce la jeringa. Apunta la boquilla hacia la lengua del equino, levanta sus labios y mueve la jeringa hacia la garganta. El lugar más idóneo para colocar la jeringa es entre los dientes incisivos y caninos. Asegúrate de sostener la jeringa de manera que puedas presionar el émbolo con facilidad. A continuación, presiona el émbolo de la jeringa y dispara el medicamento en el hocico del caballo. Una vez haya salido todo el medicamento, retira la jeringa y mantén la cabeza de tu caballo hacia arriba durante unos segundos, a fin de evitar que escupa el desparasitante.
- Desparasitar con un desparasitante pelletizado: este tipo de desparasitante se combina con la comida de tu caballo, como cereales o granos. Usa la cuchara incluida en el paquete del desparasitante pelletizado para medir la dosis correcta. Combina la dosis en el grano alimenticio de tu caballo. Solo utiliza lo suficiente para una sola comida, no para todo el día.
Estas son algunas de las técnicas que suelen emplearse para desparasitar un caballo. Ahora solo queda que aprendas a hacerlo de la mejor manera y que, ante la duda, consultes al profesional veterinario. Y ya sabes, “más vale prevenir que curar”, así que sé vigilante con el estado de salud del equino y ante cualquier tipo de síntoma, acude al especialista.